Origen: Las Horas - Cuaderno de bitácora de Octavio Salazar Benítez – 02/10/2010
El sueño continúa. El jueves por la tarde nos dieron otro empujoncito para que Córdoba siguiera soñando y, aunque pueda parecer paradójico, este sueño haga que despierte de una vez por todas. Es la hora de arrimar el hombro, de asumir compromisos. de apostar de verdad por la cultura como motor de desarrollo económico y humano, de crear en nuestra ciudad un tejido productivo y una masa crítica que nos permita aterrizar en el siglo XXI con mayores garantías de estabilidad y progreso. Es el momento en el que sobran las palabras y se requieren esfuerzos materiales y humanos. Pero, sobre todo, es la gran oportunidad que tenemos para sentirnos ilusionados, cómplices todos, entusiastas por la transformación de una ciudad a la que le sobra historia y le falta futuro.
Es la hora de defender la alegría y de, por una vez, asumir que somos capaces de superar nuestras miserias.
Aprovechemos esta puerta que se nos abre. Atrevámonos a pasar orgullosos el dintel y, después, no nos conformemos con quedarnos en la entrada. Tenemos que recorrer la casa entera.
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